Decálogo para triunfar en el ‘crowdfunding’

Conectar con un colectivo, una buena difusión y actualizar el proyecto son algunas de las claves para lograr el éxito con este modelo de financiación

La llegada de la crisis y su evolución llevó aparejada una caída en picado de los fondos destinados a fines culturales y altruistas; una caída que, sumada al crecimiento de las redes sociales –empleadas como herramientas de difusión social–, el auge del comercio electrónico y el cambio en los hábitos del consumo, ha supuesto el surgimiento de nuevas formas de financiación. En este contexto, marcado por la necesidad reinventarse para emprender proyectos, cabe situar la expansión exponencial del crowdfunding.

El fenómeno, en constante crecimiento desde el 2009, se basa en el ‘micromecenazgo‘ de proyectos a través de la red, una plataforma que constituye una poderosa arma de divulgación y visibilidad de los distintos trabajos. Para que estos alcancen el éxito deberán cumplirse una serie de premisas, 10 puntos que recoge en su tesis la doctora por la Universitat Ramon Llull de Barcelona Judith Mata:

1. Una idea que conecte con un colectivo: bien por encontrarse cercano a su realidad, bien por ser muy innovador.

2. Con un objetivo de financiación realista: que permita recaudar entre un 25 y 30% a través de la propia red de familiares, amigos y similares. Lo ideal es calcular el número de aportaciones necesarias para desarrollar la idea. La mayoría de iniciativas oscila entre los 5.000 y los 10.000 euros.

3. Un pitch poderoso: es decir, una presentación convincente, concisa y clara, que refleje las metas establecidas y la imagen de quienes las impulsan.

4. Unas recompensas atractivas: lo que obtendrá quien participe en el proyecto debe ser tangible, sorprendente, equitativo y claro.

5. Una buena difusión durante la campaña: a través de redes sociales, mensajes personales, promociones y medios offline más tradicionales.

6. Un buen vídeo de la campaña: que empatice con el colectivo al que se dirige, que cuente una historia y no sea demasiado largo.

7. Una buena difusión en el lanzamiento: según Indiegogo, el 85% de las campañas que consiguen el éxito reciben su primera aportación el primer día después de su lanzamiento.

8. Lograr el 20% del objetivo en las dos primeras semanas: solo a partir de esta cifra se produce el efecto llamada. La idea es conseguir, al menos, una contribución al día.

9. Realizar actualizaciones durante el proyecto: las novedades crean una sensación de urgencia y, de hecho, el 20% de las contribuciones repetidas se llevan a cabo tras añadir recompensas. Aportar información adicional, asimismo, respalda la idea.

10. No más de 40 días de campaña: Kikckstarter, portal de financiación colectiva, ha detecatado que los proyectos con duraciones más breves tienen mayores tasas de éxito.

El crowdfunding es motivo de debate estos días en España por la iniciativa por la iniciativa de ley del Gobierno de España en la que se propone limitar esta forma de financiación a un millón de euros por iniciativa, fijando además una contribución máxima de 3.000 euros para cada inversor.

Tras el aluvión de críticas con el que ha sido recibido el anteproyecto, el Gobierno ha dado marcha atrás y ampliará las citadas restricciones. A pesar de ellas, el crowdfunding nunca podrá dejar de perfilarse como una forma de colaborar, de compartir ideas. Como decía Zig Ziglar: “los individuos marcan goles, pero los equipos ganan partidos”.

Fuente: La Vanguardia