Una redada en Amazon Japón en busca de pornografía infantil

Amazon se enfrenta a graves sospechas en Japón: las autoridades niponas han abierto una investigación para determinar si el sitio web de comercio electrónico habría vendido pornografía infantil en dicho país.

Según recoge Bits, el blog sobre tecnología del New York Times, la unidad japonesa de Amazon ya ha explicado que está cooperando con las autoridades locales. “Nos tomamos esta investigación muy en serio, y estamos colaborando por completo con las autoridades. No permitimos productos ilegales en nuestra web, y contamos con sistemas y procesos diseñados para detectarlos y eliminarlos de nuestro catálogo”, asegura su equipo en un comunicado. La política de Amazon en Japón prohíbe explícitamente la venta de este tipo de material.

No obstante, según medios japoneses, la policía de la prefectura de Aichi organizó una redada la semana pasada en los cuarteles generales de Amazon en Tokyo y en su centro de distribución en Chiba, en busca de evidencias de venta de pornografía, como libros con fotografías de desnudos de chicas menores de 18 años.

Existen sospechas de que particulares podrían estar aprovechando la web de comercio electrónico para vender material pedófilo. La prensa nipona señala, también, que cuando este material aparece en el catálogo japonés de Amazon, no suele ser retirado con prontitud, pese a ser ilegal.

El año pasado otra redada tuvo lugar en el centro de distribución de Amazon, también en relación con la venta de pornografía infantil. En esa ocasión, dos hombres fueron arrestados después de que se encontrasen libros con imágenes pornográficas de menores de edad en venta en el catálogo de Amazon Japón.

En declaraciones al Wall Street Journal, una organización japonesa sin ánimo de lucro que trabaja por los derechos de los niños y mujeres víctimas de abusos, Lighthouse, ha señalado que ya advertido en otras ocasiones a Amazon de que su catálogo podría estar siendo utilizado para la venta de pornografía infantil. Ya en 2009 Lighthouse elaboró una lista con libros y DVD que mostraban imágenes pornográficas de menores de entre 7 y 17 años, de la que Amazon retiró el 60% del material más tarde.

“Hemos explicado a Amazon que esos libros y DVD serían considerados ilegales en el extranjero y no se venderían en sitios web como los de Estados Unidos o Reino Unido”, ha señalado al rotativo estadounidense Shikoko Fujiwara, la responsable de Lighthouse.

Fuente: TicBeat